Sobria presentación de la representación chilena a
los Juegos Olímpicos
Londres 2012, encabezada
por la linda ''huasita'' Denisse Van Lamoen, que
fue la abanderada nacional.
Inaugurados
los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Con
un espectáculo en el que desfilaron los principales sucesos de la historia de
Gran Bretaña, con el pasar de las delegaciones de todo el mundo y con la
presencia de la Realeza inglesa, ayer fueron inaugurados los Juegos Olímpicos
Londres 2012.
Sin
duda alguna fue una ceremonia más bien artística, con claros tintes culturales,
mucho más sobria que la de Beijing, pero no por ello menos impactante, que
simplemente deslumbró a miles de millones de personas que siguieron la
transmisión televisiva.
Nos
gustó el desfile de nuestra delegación nacional, con Denisse Van Lamoen como
abanderado, elegantemente vestida de huasa, encabezando a nuestra
representación, a la que desde esta página, no dedicada a los deportes, deseamos
un gran éxito.
El
Presidente y las Municipales.
Es
el propio Presidente Piñera quien lo dice hoy (ayer) en La Segunda: el
resultado de esta elección Municipal “va a fijar el clima” en que se
enfrentarán las Presidenciales y Parlamentarias del próximo año. Sus palabras
resumen una idea que es sentido común en todo el espectro, pero que La Moneda
ha asumido con particular celo. Así se entiende que el mismo Mandatario admita
que ha hecho sugerencias a los partidos respecto de candidaturas, y que durante
la semana los Ministros políticos se hayan involucrado directamente (recibiendo
en Palacio a los negociadores RN y UDI) en los intentos por desatar los
principales nudos (Valdivia, La Calera, Concepción).
La
apuesta tras ello es evidente: un buen resultado en octubre (para lo cual la
Alianza confía tanto en la fuerza de sus incumbentes como en los efectos de la
dispersión opositora) debiera cambiar el escenario de un Gobierno que —más allá
de sus logros— no remonta en las encuestas y sufre los efectos de un clima
político adverso. Una votación contundente en Concejales (en torno o arriba del
40%) y, sobre todo, triunfos vistosos a nivel de Alcaldías (léase Santiago,
capitales Regionales y alguna gran Comuna hoy en manos concertacionistas)
mostrarían que la centroderecha tiene algo que decir en 2013, y que el retorno
de Michelle Bachelet a La Moneda no es un designio irrevocable.
Al respecto, ya hay un ejemplo. En 2004, a muchos parecía imposible
impedir que Joaquín Lavín ganara la Presidencial del año siguiente. Frente a
ello, Ricardo Lagos se involucró personalmente —incluso sacando del Gabinete a
sus Ministras Presidenciables, para que fueran a hacer campaña— en una Municipal
donde la Concertación terminó triunfando. Lagos emergió de esos comicios con un
liderazgo repotenciado y pavimentó el camino para que en 2006 llegara al poder
precisamente Bachelet. ¿Podrá Piñera repetir la historia?
Las armas del Mandatario. En su entrevista con La Segunda, él
se manifiesta decidido a conjurar cualquier síntoma de “pato cojo” y a asumir
hasta el final las múltiples dimensiones que involucra su cargo en un régimen
tan Presidencialista como el chileno. Así, surgen el hombre de Estado que se
enfrenta a uno de los mayores desafíos de nuestra política internacional, La
Haya, y que cuida a la vez su legado ante la historia; el Mandatario ejecutivo,
involucrado en múltiples iniciativas y que hace de la acción un leit motiv, y
también el jefe político de una coalición conflictiva, el cual, con
pragmatismo, puede en algunos temas —como la fecha de las primarias— situarse
más cerca de la UDI que de su propia colectividad, RN. Y es la confluencia de
todos esos roles la que lo lleva no sólo a mostrarse preocupado por su sucesión
(argumentando que se juega allí la continuidad de su obra), sino incluso a
adelantar que, si llega a formarse una convicción de quién sería el mejor
candidato Presidencial, hará sentir su voz “por los canales que corresponda”.
Sin duda, su actual debilidad en las encuestas y la falta de mayoría en el
Congreso conspiran contra esos objetivos. A cambio, cuenta con el poder que
implica el control del Ejecutivo y con el relativo control de los tiempos que
le da el hecho de tener en su Gabinete a los Presidenciables de la Alianza. Hoy
Piñera se muestra decidido a usar en todo su potencial esos recursos. Y en la
apuesta por la Municipal se juega también la posibilidad de multiplicarlos y
mantener efectivo protagonismo hasta el final de su mandato.
Vértigo
negociador es un buen concepto para resumir el ambiente político de esta
semana. A excepción de la controversia por la encuesta Casen (ocasión para que
el bacheletismo mostrara su faceta más dura y su decisión de invalidar toda
comparación de la que su líder no pueda salir victoriosa), la gran preocupación
del mundo político fue la de resolver conflictos electorales. El proceso
continúa y las dos coaliciones enfrentan casos de dispersión que ponen en duda
sus opciones en comunas importantes: si en la Alianza están Recoleta y la postulación
independiente del ex Alcalde Gonzalo Cornejo (todo un golpe a la UDI), en la
Concertación la espina más dolorosa es Marco Enríquez-Ominami y su PRO, que —se
acusa— causaría un «efecto Catapilco» en favor de la derecha en cerca de cien Comunas.
Y junto a la aceleración de los tiempos, se observan también muestras de
pragmatismo inimaginables hasta hace poco, desde la renuncia de RN a llevar un
candidato de sus filas en Valdivia (la zona de su timonel, Carlos Larraín)
hasta la decisión DC de dar libertad a los suyos para usar la imagen de
Bachelet (y no de los Presidenciables falangistas) en la propaganda
institucional.
La voz de los números. La encuesta La Segunda-UDD que
también publicamos hoy entrega el panorama de algunas comunas claves. Se
confirma allí el favoritismo con que parten la mayoría de los jefes comunales
en ejercicio (incluido el edil gremialista de Santiago, en la contienda más
importante de la elección), pero también quedan en claro la alta competitividad
de estos comicios, el rol decisivo que pueden terminar jugando los candidatos
descolgados, la incógnita de los nuevos inscritos y el peso de fenómenos
discutibles, como el caudillismo. La evolución que tengan estos factores será
otra arista de una elección donde, como se ve, no sólo se juegan los Gobiernos
Comunales.
No
al control total de la universidad.
Iglesia
y Estado son las dos instituciones que controlan la mayor parte de la educación
superior. Se la reparten casi por mitades. Si el Estado tiene la Chile, la
Iglesia posee la Católica. Si el Estado cuenta con una red de universidades a
lo largo del país, no lo hace mal la Iglesia en Antofagasta, Coquimbo,
Valparaíso, Concepción y Temuco.
Se
dice habitualmente que el Estado debe privilegiar sus universidades y no
compartir recursos con los “privados”, en donde esos privados son, en una parte
sustancial, las instituciones vinculadas a la Iglesia. Pero, ¿por qué no? Se
dice que sólo la educación superior pública y laica asegura pluralismo y
diversidad suficientes para que la enseñanza y la investigación se realicen en
libertad. En esta afirmación estaría implícito que, cuando una institución de
educación superior no pertenece al Estado (no es pública y laica), sino a la
Iglesia, no es suficientemente plural y diversa como para asegurar la libertad
de enseñanza e investigación. Pero, ¿es tan así?
Me
parece que no.
Si
se mira el panorama nacional, las universidades católicas evidencian una
diversidad mucho mayor que las estatales. Si en el Estado son todas
institucionalmente iguales o muy parecidas, y se distinguen sólo por la mayor
tajada del presupuesto que se lleva la Chile respecto de las demás, las
universidades católicas son muy distintas entre sí. Las hay pontificias y no
pontificias; las hay también de movimientos tan variopintos como los jesuitas,
el Opus Dei y los Salesianos. Mientras el Estado se dedica aquí y allá a la
educación técnica, la Iglesia, con CFT e IP al alero de sus universidades, ha
logrado llevar adelante proyectos gigantescos, como el Duoc, donde la mayor
parte de los alumnos provienen de los quintiles más pobres del país. El
espectro social de los estudiantes es tan diverso como el de sus modelos
institucionales.
En
lo que toca al pluralismo al interior de las instituciones, los hechos también
muestran un panorama muy distinto al del lema estudiantil. Compárese la
diversidad de enfoques y creencias de Sociología en la PUC o Filosofía en la
UAH con lo que ocurre en Derecho de la U. de Chile, donde, más allá del
indudable mérito de muchos de sus egregios profesores, hay una manifiesta
tendencia iusfilosófica. Si es difícil advertir una inclinación política
uniforme en las universidades de la Iglesia, para nadie es un secreto que las
del Estado se inclinan hacia la izquierda, moderada o radical.
No
pretendo con estos datos hacer un juicio a las universidades estatales. Está
bien que existan. Tampoco pienso que todo en las católicas esté bien. Sería
recomendable avanzar hacia un estatuto nacional, válido para unas y otras, que
fortalezca, por ejemplo, la libertad de cátedra. Lo que quiero hacer ver es que
el panorama es más complejo que como habitualmente se lo presenta: estatalidad
no es igual a pluralismo y diversidad. Más aún: como advertía Montesquieu, es
la división del poder (en este caso entre Iglesia y Estado) la mejor garantía
para la libertad y, al contrario, concentrarlo todo en manos de un mismo
titular (Estado o Iglesia) es dar un paso hacia el totalitarismo. Conviene
pensar en esto cuando se pretende negar igualdad de financiamiento a las
privadas sin fines de lucro.
La
Araucanía, orden público y desarrollo.
En
respuesta al recrudecimiento de la violencia en La Araucanía, el Presidente de
la República encabezó una "cumbre de seguridad", en la que
participaron el Ministro y el Subsecretario del Interior, las máximas Autoridades
de las policías y del Ministerio Público, el Intendente de la IX Región y Autoridades
locales. La reunión culminó con el envío de un equipo multidisciplinario para
asistir a las víctimas de los atentados y la agilización de medidas de apoyo al
desarrollo productivo para la zona en conflicto. El plan de seguridad incluye
un apreciable aumento de las dotaciones y tecnologías policiales, y una
instancia de coordinación de las informaciones y operaciones de las policías,
que se añaden a la reciente designación de un coronel al mando de una unidad
especializada para operación en terreno.
La
violencia en La Araucanía experimenta un nuevo incremento en ciertas
localidades de las Provincias de Malleco y Biobío. Sectores radicalizados
continúan perpetrando tomas ilegales de predios e incendios en perjuicio de
comuneros, medianos propietarios y empresas forestales, mientras se multiplican
las agresiones a Carabineros. Los violentistas constituyen grupos reducidos,
pero los daños causados a la propiedad y las transgresiones al orden público
son significativos. Según la encuesta Casen, en el territorio nacional habitan
cerca de un millón de mapuches y sólo la cuarta parte reside en La Araucanía,
en su gran mayoría integrados a la sociedad y respetuosos de la institucionalidad.
La
conflictividad en La Araucanía se arrastra por décadas y surgió de promesas
oficiales incumplidas, desamparo, falta de oportunidades y reclamos por
ocupación de determinadas tierras que no siempre respetaron los derechos de los
pueblos originarios. Confirman el agraviante rezago respecto del resto del país
los magros indicadores de pobreza, ingresos, participación laboral y acceso a
la educación. También han contribuido a esa postergación políticas erróneas y
excluyentes, centradas en la compra y entrega de tierras, transferidas
discrecionalmente, muchas veces bajo presiones, con preferencias para los
colectivos más radicalizados, y programas de apoyo disfuncionales.
El
Gobierno afirma estar impulsando algunas rectificaciones mediante la objetividad
en la entrega de tierras pendientes, con exclusión de los violentistas de estos
beneficios. A la vez, en los últimos dos años se incrementó la cobertura
asistencial de dos mil 500 a 16 mil familias, mediante el Programa de
Desarrollo Territorial Indígena de Indap, y se aumentó sustancialmente el
presupuesto de caminos indígenas del Ministerio de OO.PP. Ya se observan
algunos progresos en las políticas de reconocimiento cultural, en el proceso de
diálogo del cerro Ñielol, que significó más de 60 mesas de trabajo y dos nuevas
áreas de desarrollo indígena, en las Comunas de Collipulli y Ercilla, y en la Provincia
de Arauco. En materia educacional, se han puesto en vigor programas especiales
de lectoría, de apoyo compartido a los estudiantes más vulnerables y la
instalación de cinco liceos de excelencia y uno de carácter intercultural en
Purén. A resultas de estas acciones ya se perciben mejorías en la educación,
según el Simce, y avances en la reducción de la pobreza, según la última
encuesta Casen.
La
Araucanía sigue siendo la Región más pobre de Chile, con un desempleo mayor que
la media nacional. De allí la necesidad de agilizar y profundizar políticas que
promuevan el desarrollo del pueblo mapuche, especialmente en cuanto a empleo,
capital humano y emprendimientos con apoyo del sector público y alianzas con el
sector privado. Para que prosperen los planes de desarrollo social y económico
se requiere actuar con decisión y, a la vez, aislar y perseguir con energía las
responsabilidades de los violentistas que amagan el progreso regional, impiden
la vigencia del orden público y atentan contra el Estado de Derecho en esa Región.
Muerte de (¿o a?) un disidente.
Por la falta de transparencia, la persecución y el acoso
constante a los disidentes en Cuba, son naturales las dudas sobre el accidente
en que murió el líder opositor Oswaldo Payá junto a otro ciudadano cubano, y en
el que resultaron heridos un joven español y un sueco. Por eso, es acertada y
justa la solicitud del Gobierno chileno -que también hicieron EE.UU. y España,
entre otros- de pedir que se recaben todos los antecedentes para tener certeza
de que la versión oficial cubana es fundada.
El secretismo del régimen comunista -reiterado por Raúl Castro,
quien en la conmemoración del asalto al Cuartel Moncada no mencionó a Payá- y
acciones represivas como la detención de una cincuentena de asistentes a los
funerales del líder opositor contribuyen a las sospechas sobre la verdad de la
declaración del régimen. Tampoco parece natural -y aviva las suspicacias- el
hecho de que al Senador chileno Patricio Walker se le revocara en cuestión de
horas una visa de turista, lo que le impidió asistir al sepelio.
La muerte de Payá es una gran pérdida para los sectores
democráticos de la isla. El líder fundador del Movimiento Cristiano Liberación
e impulsor del "Proyecto Varela" -iniciativa que promovía una
transición democrática basada en la propia Constitución castrista, que permite
a la ciudadanía pedir un referéndum- era la figura que tuvo mayor éxito en
aglutinar a la fraccionada disidencia cubana. Su mérito, según el famoso
disidente Guillermo Fariñas, fue movilizar con sus proyectos a los opositores en
la isla, algo nada fácil debido al temor ciudadano frente al represivo aparato
de seguridad estatal.
El "Proyecto Varela" vio la luz en 2002, y se le
entregaron más de 11 mil firmas a la Asamblea Nacional, que debía convocar al
referéndum en que se pediría libertad de expresión, de asociación, una amnistía
para presos políticos y elecciones libres. Como era previsible, el régimen
ignoró la petición, respondiendo con una reforma constitucional en que se
declara el socialismo como un "principio inamovible" del sistema.
Luego vino la represión, se detuvo a más de 70 disidentes, y Payá comenzó a ser
hostigado, recibiendo todo tipo de amenazas.
Con Raúl Castro en el poder, las cosas algo han cambiado para la
disidencia. El Gobierno está embarcado en complicadas reformas económicas, que
hasta ahora han tenido escaso éxito. Por eso, hay quienes piensan que la muerte
de Payá fue efectivamente un accidente, pues al actual Presidente no le
conviene crear incidentes con repercusiones internacionales.
Otros, más suspicaces, piensan que si no fue un accidente,
podrían ser los enemigos de Raúl dentro del régimen quienes estén detrás de lo
ocurrido: tal vez, sectores de vieja guardia que ven amagados sus posiciones
querrían, precisamente, crearle problemas y obstaculizar sus cambios.
El mejor homenaje a Oswaldo Payá es exigir que se esclarezca la
verdad. Su desaparición golpea a todos quienes desean para Cuba una pronta y
exitosa transición a la democracia.
UN PAR DE CARTA INTERESANTES
Señor Director:
Disímil
actitud de Bachelet.
Al término de los funerales del disidente cubano Oswaldo Payá,
cientos de asistentes fueron detenidos por las fuerzas castristas por el solo
hecho de gritar “libertad” y simbolizar este concepto con una “L” formada con
los dedos de sus manos.
Entre los detenidos hubo una cantidad importante de mujeres
luchadoras por la democracia en Cuba, que se agrupan bajo el nombre de “Damas
de Blanco”.
Nada dijo la directora ejecutiva de ONU Mujer, Michelle
Bachelet, respecto de estas mujeres reprimidas por su lucha libertaria. Eso sí,
cuando viajó a Cuba, no dudó en protagonizar un bochornoso trotecito para
acudir al llamado del tirano.
Miguel Huerta Marín.
Señor Director:
Efectos de
la marihuana.
En relación con el debate acerca de la marihuana suscitado hoy
en los medios, cumplimos con señalar a la comunidad que se ha certificado
científicamente que el uso crónico de marihuana produce daño en el sistema
nervioso central, con resultado de menoscabo permanente de funciones mentales;
entre otras, la capacidad de llevar a cabo tareas complejas, la de persistir en
tareas dificultosas y la de diversas formas de memoria.
Prof. Dr. Luis Risco N, Departamento de Psiquiatría Hospital
Clínico Universidad de Chile.
ONU Mujeres,
dirigida por Michelle Bachelet,
ni siquiera
se ha referido a las arbitrarias detenciones
de las damas de blanco, en Cuba, en funerales de
Payá