Piñera dijo en Ercilla que ‘’algunos creían
que no nos atrevíamos a venir, les digo
con toda la fuerza del alma: juntos vamos
a levantar Ercilla, juntos vamos a levantar
la Región de La Araucanía’’.
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Chile
cosechó su tercera derrota consecutiva
al
caer anoche por 2 golea a 1 frente al
seleccionado
argentino, el equipo de Borghi
subió
su nivel, pero siguió con problemas
defensivos.
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Permiso “mula” para emigrar a los cubanos, con
solo pasaporte y visa, excluye a deportistas,
médicos, universitarios graduados y directivos
de organismos estatales. |
Inflación durante septiembre se mantuvo estable
en la Eurozona y en la UE. La oficina de
estadística comunitaria Eurostat informó hoy que
las cifras se situaron en el 2,6% y 2,7%,
respectivamente.
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El segundo debate entre el Presidente Obama
y el desafiante Mitt Romney, nos mostró a un
Obama más activo, pero, lamentablemente
usando la descalificación en vez de argumentos.
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Piñera sostuvo encuentro con la comunidad
de Ercilla.
El Presidente Sebastián
Piñera, en el marco de su visita a la Región de La Araucanía, se reunió con la
familia del parcelero asesinado a principios de septiembre, Héctor Gallardo, y
sostuvo un encuentro con la comunidad de Ercilla, luego de lo cual aseguró que
“estoy muy consciente que la región de La Araucanía tiene muchos problemas, es
una de las regiones más pobres de nuestro país, pero al mismo tiempo, con
mayores oportunidades”.
Asimismo, agregó que
debido a esto “hemos establecido esta Área de Desarrollo Indígena aquí en
Ercilla y hemos sacado adelante el Plan de Desarrollo de la Región de La
Araucanía”. Este último “involucra una inversión muy importante, que va a
aumentar en más de 50% la inversión que se hacía en los gobiernos anteriores”.
El Mandatario también
se refirió a los hechos de violencia que afectan a la zona: “La violencia no va
a prevalecer. El camino del diálogo, de la paz y del trabajo, es el que juntos
vamos a recorrer para que la región de La Araucanía pueda brindarle a todos y
cada uno de sus hijos, una vida plena, digna, con más oportunidades y más
feliz”.
Además, afirmó que
“como Presidente de todos los chilenos, pero muy especialmente de los chilenos
más humildes y de clase media, adquiero con ustedes un compromiso de honor esta
mañana aquí en Ercilla. Vamos a derrotar a aquellos que creen que la violencia
es el camino para sacar adelante a La Araucanía. Y los vamos a derrotar con las
armas de la ley y con el Estado de Derecho”.
Por eso, “hoy día
aquí en Ercilla, donde algunos creían que no nos atrevíamos a venir, les digo
con toda la fuerza del alma: juntos vamos a levantar Ercilla, juntos vamos a
levantar la Región de La Araucanía”, finalizó el Presidente Piñera.
Antes de esta reunión
con la comunidad ercillana, el Presidente Piñera participó en la primera sesión de
trabajo del Área de Desarrollo Indígena (ADI) de Ercilla, iniciativa Presidencial
comprometida durante su última cuenta pública al país, a la que se han
incorporado 37 de las 42 comunidades que habitan en la zona, que se realizó en
Temuco.
10ª fecha Clasificatorias
Sudamericanas Brasil 2014.
En los partidos jugados
ayer de la 10ª fecha de las Clasificatorias Sudamericanas para Brasil 2014 destacó
la goleada de Bolivia, 4-1, sobre el representativo de Uruguay, el triunfo de
Paraguay sobre Perú, 1-0, el empate a 1 de Venezuela y Ecuador
Quedarán las élites
doradas y las verdes,
por Joaquín Fermandois.
El rechazo a la
central Castilla ha tenido el efecto de un remezón que nos llama a interpelar a
aquello que queremos para Chile. Sin desconocer que hay que entregar una
respuesta creíble a los lugareños, y que los Jueces deben fallar en torno a las
leyes escritas, sentimos que algo ha salido rematadamente mal, y que como país
nos vamos introduciendo en un atolladero; una vez franqueado inadvertidamente
un límite inmaterial, no vamos a poder extraernos de la trampa que nos
envolverá. Será un cuello de botella más para alcanzar una auténtica mejoría en
lo económico y en lo social. La energía está en el tapete, ya que estamos
agotando las reservas. Para colmo, por varias décadas nos hemos preocupado poco
y nada del agua, y sufrimos años de sequía relativa; la suma de eso nos acerca
a una escasez permanente y aterradora para la agricultura y para las fuentes de
energía.
Es difícil negar el
argumento ambiental. La débil capa de verde que recubre el planeta y la
certeza, hasta ahora, de que no tenemos otro punto en el espacio exterior en el
cual poner nuestras esperanzas hacen que deba ser revisada la empresa de
recubrir la Tierra con cemento. ¿Será, entonces, que debemos encaminarnos a una
Arcadia, una sociedad agraria, bucólica, de pocos habitantes, cada uno
trabajando con sus manos? Lo más seguro es que una vuelta a una utopía del
pasado nos lleve directamente a una situación de lucha de todos contra todos;
una catástrofe de la civilización.
Así como la
probabilidad más cierta de superar la pobreza radica en el desarrollo económico
-aunque no sea lo único-, también se puede afirmar que no existirá conservación
de lo terrestre de la Tierra sin una maduración económica que comúnmente se
denomina "desarrollo". ¿Por qué? Porque la vinculación de ciencia,
técnica y economía moderna es lo que ha contribuido a la aparición de la crisis
ambiental, y es también lo único que la puede canalizar y quizás domeñar. Por
ahora, la adaptación de la economía a las necesidades medioambientales ha ido
con más lentitud que cuanto quisiéramos, pero si tomamos la medida de medio
siglo -el lapso mínimo para poder comparar-, han sido fenomenales los cambios
en los comportamientos productivos y los usos.
En los países
atravesados por lacras de pobreza endémica y sin visos de crecimiento económico
y social, o en experiencias no tan lejanas en el tiempo, los sistemas marxistas
industrializados o que se tenían por tal -Alemania comunista fue un ejemplo
atroz-, la polución era y es la orden del día. El descuido de la naturaleza
vegetal y animal adquirió proporciones dantescas. En todos estos casos, la
mugre parece definir lo más visible de la vida cotidiana.
Será el paisaje de
toda civilización que no afronte de manera sensata y con una mínima
autodisciplina su desarrollo y relación con el medio ambiente. Desprovistos de
estas condiciones, sólo podrían vivir como conservacionistas unas pocas élites
doradas que siempre ha habido, o el nuevo tipo de élites verdes. La inmensa
mayoría remaría hacia otro norte menos auspicioso.
La jugada no está
perdida. La economía no es el único presupuesto, aunque muchos quisieran
olvidarla. Es cierto que se requiere de una transformación de la mentalidad
-que ya ha comenzado entre nosotros-, no sólo de conservación, sino que también
algo más profundo, de no alentar la avidez por todo, y menos que nada aceptar
el advertising con ceguera. Esta meta no se alcanzará por medio de un programa
técnico o legal, tributario o político, y resultaría en una finalidad aviesa si
se impone de manera hostil a las buenas posibilidades que ofrece la economía
moderna.
Los grandes cambios,
por Leónidas Montes.
Nuestro país ha
vivido, en los últimos treinta años, cambios sustantivos. El histórico progreso
económico ha cambiado nuestra fisionomía en lo político, social y cultural.
Chile ha multiplicado su ingreso per cápita por cuatro. Como consecuencia de
este sostenido crecimiento, hemos reducido la pobreza a un ritmo sorprendente y
con una admirable focalización en los grupos más necesitados. Al margen de los
eslóganes contra el mercado y el lucro, los chilenos hemos mejorado nuestra
calidad de vida material. Pero todo esto no ha sido en vano: en nuestro país
algunos principios liberales ya se encuentran bien arraigados.
En este contexto,
nuestra Iglesia Católica no supo leer los cambios que se han producido. A
juzgar por el contenido de la reciente Carta Pastoral, pareciera que nuestros Obispos
pretendieran criticar las causas de esta nueva sociedad que dejó ciertos
espacios que no supieron llenar. Acompañar con la vida espiritual los avatares
de la vida material es la misión de cualquier religión. En este sentido,
debemos reconocer que, a diferencia del quejumbroso llamado de la Iglesia Católica
contra el mercado, el lucro y el crecimiento económico, los evangélicos sí que
han sabido leer estos cambios y llenar esos vacíos. Para comprobarlo, sólo
basta con observar la evolución del mercado de los fieles, feligreses y
seguidores. En esto último, no cabe duda de que los evangélicos han sido
exitosos.
En Chile hemos
logrado consensuar y promover cambios institucionales que nos han permitido
avanzar como nunca en nuestra historia. Los Chicago boys, pese a todas las
críticas, hicieron la pega. Exitosamente abrieron el mercado, ordenaron,
privatizaron y promovieron la competencia cuando Chile era sólo otro país sud o
sub-americano. Fue una corriente avasalladora que, con su dictum utilitarista,
implementó cambios fundamentales. No obstante, en nuestra actual etapa de
desarrollo, el dogmatismo de Chicago y también el rol preponderante de los
economistas perderán protagonismo. En el Chile del futuro, las ideas, y no sólo
la economía y las cifras, volverán a jugar un rol fundamental.
El reciente Informe
de Desarrollo Humano del PNUD es importante en este sentido. Reconociendo que
la felicidad es subjetiva, desarrolla un índice de subjetividad individual y
otro social. Y el resultado es que los chilenos están contentos con sus propias
vidas, pero no están satisfechos con la sociedad en la cual viven. Siguiendo la
línea de los capabilities de Amartya Sen, el informe se concentra en las
libertades reales para definir y realizar nuestros proyectos de vida deseados.
De las cinco “capacidades” analizadas, destacan la seguridad y el respeto. La
seguridad se entiende en el sentido amplio de trabajo, salud, previsión y
seguridad ciudadana. Y el respeto, como derechos individuales y dignidad, que
son precisamente las carencias que perciben los ciudadanos. El malestar latente
se refleja en esta aparente paradoja entre satisfacción personal y el
descontento ante nuestra sociedad. En definitiva, las aspiraciones individuales
se encuentran con barreras sociales y culturales.
Por otro lado, según
la última encuesta CEP, el 78% de los chilenos piensa que el Estado debe apoyar
a los más pobres “a través de programas que mejoren sus capacidades (como
educación o capacitación)”, y sólo el 18% que esto debiera ser “a través de
transferencias de dinero (bonos)”. Esta tendencia creciente a confiar cada vez
más en las capacidades de las personas y no en un Estado benefactor es, a la
vez, causa y efecto de este Gobierno (fue con el eslogan de “más Estado” que
perdió Frei ante Piñera), el cual ha logrado impulsarla y ampliarla. Hoy la
mayoría de los chilenos ya no quieren más Estado, sino un mejor Estado y más
oportunidades.
La libertad
individual sumada a los desafíos sociales en cuanto a derechos y dignidad
constituyen los ejes para el nuevo Chile liberal. Pero este desafío será inútil
si no promovemos los valores de la responsabilidad y la tolerancia. Porque, al
final, la libertad individual sin responsabilidad es ciega, y una sociedad que
sólo promueve derechos y dignidad, sin tolerancia, es vacía.
Oportunidades de
progreso para las comunidades mapuches.
Como parte de las
medidas que el Gobierno ha venido anunciando e implementando en el marco de su
política indígena para promover el desarrollo de las comunidades mapuches
ubicadas en la Región de La Araucanía, el Presidente de la República firmó la
semana pasada el decreto supremo que permitirá establecer la primera Area de
Desarrollo Indígena (ADI). Esta política contempla, entre varios aspectos, un
programa de adquisición de tierras, asesorías productivas para las plantaciones
agrícolas, apoyo para el emprendimiento y obras de mejoramiento en
infraestructura vial y salud.
A diferencia de
iniciativas implementadas en el pasado que tenían como eje principal la compra y
adjudicación de propiedades a las familias de esas comunidades -terrenos que en
su gran mayoría permanecían improductivos al no entregárseles a los
beneficiados una capacitación adecuada para trabajarlos-, este plan parece
dirigido precisamente a abordar esas deficiencias, ya que incorpora de manera
integral una serie de ámbitos que, desplegados en conjunto, pueden llegar a
constituir una herramienta eficaz para que los habitantes de esas zonas, muchos
de ellos afectados por la pobreza, puedan salir adelante por sus propios
medios.
Para que se cumpla
ese objetivo, el Gobierno debe ser cuidadoso con la forma que implementa
ciertas medidas incluidas en la ADI que parecen repetir el carácter asistencialista
aplicado en programas Gubernamentales anteriores, especialmente las
relacionadas a entrega de tierras, que han demostrado ser ineficientes y se han
prestado para manejos controvertidos. No obstante, el Ejecutivo hace bien en
promover esta política de Estado para intentar resolver un problema que se arrastra
hace décadas, colocando el énfasis en el emprendimiento y en la capacidad de
las personas para crear sus propias fuentes de sustento. Resulta fundamental,
entonces, entregarles a las comunidades mapuches las herramientas necesarias
para que puedan superar la situación de precariedad en que se encuentran y, de
paso, resolver demandas que en ocasiones no han encontrado una respuesta
oportuna ni eficiente.
La Araucanía presenta
el más alto nivel de pobreza del país, de acuerdo a la última encuesta Casen
(23%). Este factor ha sido esgrimido equivocadamente como argumento por grupos
minoritarios para justificar la violencia que ejercen en ese territorio
mediante ataques y amenazas contra personas y empresas. Sólo este semestre han
ocurrido casi un centenar de incidentes en la zona. Por ende, si se aspira que
este programa sea exitoso, no es suficiente contar con el apoyo de la mayoría
de las comunidades existentes en la región (37 de las 42 apoyan el plan), sino
que es necesario también enfrentar con firmeza a los violentistas que se oponen
a cualquier tipo de solución que se plantee en esta materia. Por ejemplo, no es
aceptable que el lonco mapuche que asumió la dirección de la ADI haya sido
víctima de un ataque incendiario contra su casa como vía de amedrentamiento.
Aparte de mostrar el nulo interés de los grupos más radicales por terminar con
el conflicto, este incidente da cuenta de un grado de desprotección que debe
ser subsanado.
Mantener el orden
público en la zona es una condición ineludible que debe garantizar el gobierno
si quiere lograr un desarrollo sostenido de las comunidades mapuches. No
hacerlo colocará en riesgo la viabilidad de la política indígena y profundizará
la condición de vulnerabilidad de sus habitantes.
Mejores soluciones
habitacionales.
El Gobierno comenzará
a impulsar un programa que tiene como propósito, en una primera etapa,
remodelar o demoler cerca de cuatro mil viviendas sociales ubicadas en cinco
poblaciones del país. En su mayoría, se trata de construcciones que formaron
parte de las soluciones habitacionales implementadas en décadas anteriores y
que presentan características que hoy las hacen poco atractivas: no superan los
40 metros cuadrados, están emplazadas en sectores sin infraestructura o áreas
verdes, carecen de servicios de salud, educación o policía y enfrentan, además,
dificultades de transporte.
Si bien este tipo de
vivienda fue en su momento funcional a las necesidades urgentes que tenía el
país de dotar de un techo sólido a miles de personas que vivían en precarias
condiciones y su construcción estuvo condicionada por las restricciones
presupuestarias existentes entonces, las necesidades actuales han hecho urgente
que sea reemplazado por viviendas con otros estándares.
La iniciativa del
Ministerio de la Vivienda es positiva, porque da respuesta a un anhelo que
tienen muchos chilenos de escasos recursos de mejorar su vivienda o mudarse a
una nueva. Para ello, el Gobierno contempla entregar un subsidio, que en el
caso de las personas que se cambiarán de casa incluye un bono de movilidad de
10 UF para la mudanza y otro de 36 UF (en dos años) para ayudarles a pagar un
alquiler mientras encuentran una vivienda definitiva.
Está contemplado
también que la medida permita a los beneficiarios decidir si quieren permanecer
en el mismo sector donde residen hoy o trasladarse a otro barrio. Si bien es
importante que se respete esa opción, se hace necesario contar con una
estrategia que evite que las viviendas abandonadas transformen esos barrios en
guetos. Es probable que esto requiera que se expropien algunas construcciones
para reemplazar y reedificar íntegramente las antiguas urbanizaciones.
Cuenta pública de
Parlamentarios.
El Senador Hernán
Larraín (UDI), ex Presidente del Senado, y los Senadores Escalona (PS),
Zaldívar (DC) y Novoa (UDI), que también lo presidieron, han presentado un
loable proyecto de reforma Constitucional, que si fuere aprobado, obligaría a
los Presidentes de la Cámara y del Senado, y además a todos los Parlamentarios
en ejercicio, a rendir una cuenta pública anual ante la ciudadanía. Esta idea
es del todo novedosa y sintoniza con los tiempos políticos. Hace ya tiempo que
la ciudadanía ha venido castigando al Congreso en las encuestas: en comparación
con los poderes Ejecutivo y Judicial, la aprobación de los Parlamentarios es
notoriamente inferior, en lo que ya constituye una tendencia preocupante, pues
concierne a la imagen de una institución absolutamente esencial de nuestro
ordenamiento democrático.
El Presidente de la
República y el de la Corte Suprema rinden anualmente sus cuentas al país. El
Jefe de Estado lo hace prácticamente desde la fundación de la República por
exigencia Constitucional. La cuenta la recibe el Congreso Pleno, el 21 de mayo
de cada año. A su vez, el Presidente de la Corte Suprema lo hace por mandato
del Código Orgánico de Tribunales desde 1919, el último día del feriado
judicial, primero de marzo de cada año. Pero los Parlamentarios mismos, esencia
del Congreso Pleno que escucha la cuenta Presidencial, no rinden ninguna clase
de cuenta formal. Se entiende la lógica histórica de este diseño: los Parlamentarios
fiscalizan al Gobierno, inician y resuelven el juicio político, incluidos los Magistrados.
Pero ese modelo ha ido cambiando paulatinamente con las décadas, y debe seguir
haciéndolo.
El proyecto referido
resuelve este vacío. Se suma a la modificación aplicable a la Administración,
cuyos órganos deben rendir cuenta anual desde la modificación de la Ley N°
18.575 en 2011. En virtud de ella, ahora se les pide una cuenta pública y
participativa de la gestión de sus "políticas, planes, programas, acciones
y de su ejecución presupuestaria".
La reforma Constitucional
ahora propuesta obligaría a los Presidentes de la Cámara y el Senado a rendir
la cuenta ante el Congreso Pleno, anualmente el día 4 de julio -estatuido como
aniversario del primer Congreso Nacional-. El acento de esta cuenta está en la
objetividad y el avance institucional, no en la propaganda. Así, deben
incluirse en ella "las dificultades y errores advertidos en el desempeño
de sus funciones". Y a cada Parlamentario se le exigirá igual cuenta, ante
sus respectivos distritos y circunscripciones. Se encarga a la ley resolver los
detalles de esta encomiable iniciativa de transparencia y legitimación
democrática, que -es de esperar- encontrará natural y general acogida
transversal. No se advierten razones atendibles por las cuales algún
parlamentario pudiera oponerse a su aprobación.
Nota de la Redacción:
Sobre la necesidad
que los Parlamentarios rindan cuenta publica llevamos más de 20 años
predicando, considerando que es una avance, creemos que el proyecto debe
ponerse en la situación de que la ciudadanía rechace la cuenta de sus
representantes y considerar una forma de revocación del poder otorgado por
abandono de deberes e incumplimiento de promesas electorales.
Extensión de la
subvención preferencial.
El Ministerio de
Educación ha anunciado la extensión de la subvención escolar preferencial a la
educación media en 2013, para apoyar a los establecimientos municipales y
particulares subvencionados que reciben estudiantes pertenecientes al 40% más
vulnerable del país.
Para optar a esta
subvención, que implica un ingreso extra de más de 20 mil pesos mensuales por
alumno, los colegios deben postular y firmar un convenio de desempeño mediante
el cual se comprometen a realizar un diagnóstico y un plan de mejoramiento
educacional de acuerdo con su programa específico -ya sea liceo o escuela
técnica-, e invertir los recursos directamente en esas mejoras. Parte
importante de estos fondos debieran destinarse a los profesores, que en este
ciclo requieren un mayor nivel de especialización.
Más de 450
establecimientos postularon el mes pasado para recibir este beneficio estatal,
ante lo cual la Autoridad amplió el período de postulación, para integrar al
máximo de colegios interesados y así apoyar sus respectivos planes de
perfeccionamiento, respetando sus particularidades y diferenciaciones, en
congruencia con el principio básico de libertad de enseñanza.
La extensión a 1°
medio de la subvención escolar preferencial -completando el ciclo en 2016-
significa la incorporación de más de 100 mil nuevos estudiantes a esta
modalidad, los que se suman a los más de 900 mil alumnos de básica que ya la
reciben.
Los altos costos
involucrados por la extensión de la cobertura y el aumento de las asignaciones
de 5° a 8° básico obligan a una fiscalización rigurosa, para así focalizar con
eficacia el uso de los recursos públicos y conseguir un real efecto en la sala
de clases. Al respecto, la labor que está realizando la Superintendencia de
Educación Escolar parece encaminada precisamente a establecer las condiciones
para eso. Las recientes 500 multas, cursadas por diversas infracciones en el
manejo de la subvención escolar preferencial a escuelas de Municipios y
sostenedores particulares, son una positiva manifestación de un buen proceso
fiscalizador, pero, a la vez, confirman la realidad de gestiones aún
deficientes de directores y administradores.
Toda iniciativa para
elevar la calidad de la enseñanza media debiera redundar en egresados mejor
capacitados para insertarse exitosamente en la educación superior, lo que en el
futuro debería permitir erradicar los cursos remediales que muchos programas
-demasiado extensos según la Autoridad- incluyen hoy, por las carencias de
conocimientos básicos que debieran ser adquiridos durante el periodo escolar.
Asimismo, debería incidir positivamente en la reducción de las cifras de
deserción y fracaso académico. Es de presumir que las nuevas destinaciones de
ingentes recursos públicos adicionales conllevan el simultáneo establecimiento
de sistemas de medición periódica para ir evaluando su grado de real eficacia.
Grandes planes y cambios
en transportes.
El millón de
automóviles adicionales que se prevé ingresarán al tráfico de Santiago al
principio de la próxima década congestionarán más aún la capital, a menos que
ella esté preparada. Al respecto, el Ministerio de Transportes ha ideado un
nuevo plan maestro para el quinquenio 2020-2025, que intenta aumentar el uso
del transporte público para viajes de larga distancia en medios masivos, como
el Metro o trenes de acercamiento. De otra forma, Santiago podría terminar como
Sao Paulo, donde los costos de congestión ya están llevando a la emigración de
personas y empresas.
El nuevo proyecto
planea una sola nueva línea del Metro, adicional a la 2 actualmente en
construcción, que iría por Santa Rosa, y la extensión de las demás. En
particular, la línea 4A, actualmente un simple estribo de la 4, se extendería
hasta Maipú, con lo que casi se conformaría un Metro periférico (considerando
las extensiones de esa misma línea hasta Renca), que tendría un rol similar al
de Américo Vespucio, conectando zonas de Santiago sin pasar por el centro. La
línea 5 y la futura línea 3 se extenderían a San Bernardo y al nuevo Hospital
Militar, respectivamente, respondiendo a antiguas peticiones comunales. La
línea 1 tiene un retorno en la zona poniente, con lo que sería una nueva
paralela a sí misma al norte de Quinta Normal. En la zona oriente, la línea 6
llegaría a los nuevos barrios de negocios y habitacionales cercanos al río.
Respecto de los
trenes de acercamiento, el previsto al aeropuerto es una necesidad,
considerando el número futuro de pasajeros por transporte aéreo. Los otros
trenes de acercamiento también representan buenas ideas para reducir los costos
y los tiempos de transporte.
El mayor interrogante
de este plan -interesante, ambicioso y bienvenido- es una aparente desconexión
de la planificación urbana: debería estar coordinado con quienes diseñan el
desarrollo futuro de la ciudad, en vez de pensarlo sólo en función de la
evolución futura del patrón de viajes actuales. Otras debilidades resultan más
acotadas. Parece obvio extender la línea 6 hasta Maipú, proveyendo a los
habitantes de esa comuna de otro medio para un rápido acercamiento al centro y
la zona oriente. Asimismo, cabría pensar en un sistema de buses rápidos en el
eje Alameda-Providencia-Apoquindo, destinando a ello una mitad de esas
avenidas. Al segregar los buses del transporte privado, la velocidad de ambos
aumenta para un mismo número de carriles. Tal sistema aliviaría la línea 1 del
Metro, además de proveer viajes cortos más cómodos y rápidos que en éste.
El Metro actual soporta 2,3 millones de viajes diarios, lo
que significa unos 830 millones de viajes anuales. Esta cifra es la mitad de
los viajes del subterráneo de Londres, que tiene una extensión cuatro veces
mayor, y en una ciudad con la mitad de la población. Desde esta perspectiva, el
plan Ministerial que extiende el Metro y otros sistemas de transporte masivo es
razonable, especialmente en un país que en ocho años será -se espera- bastante
más rico que en la actualidad. Si este plan se integrara con los de desarrollo
urbano, se podría ser optimista sobre el futuro de Santiago, pese al aumento
del parque automotor.
Casi simultáneamente,
este Ministerio ha anunciado un importante plan de reestructuración, que quizá
contribuya a resolver algunos de los interrogantes planteados. Se crearían
cuatro nuevas divisiones: la de Planificación y Desarrollo, para la adaptación
de la ciudad a las nuevas necesidades; la de Usuarios, para recoger las
necesidades ciudadanas; la de Logística, para coordinar el desarrollo de las
cargas ferroviarias, viales y portuarias, y la de Normas, para regular la
operación del ministerio. Adicionalmente, se crearían dos directorios: el de
Transporte Público Metropolitano, que buscará analizar el transporte en forma
integral (incluyendo ferrocarriles, Metro, Transantiago, taxis y colectivos), y
el de Transporte Público Regional, que diseñará y ejecutará planes locales para
las grandes ciudades en forma focalizada.
Parte de la imagen
negativa de este Ministerio en los últimos años, tras el fracaso del
Transantiago y otros problemas comparativamente menores, como el colapso de las
plantas de revisión técnica, se ha revertido con la gestión del actual Ministro,
Pedro Pablo Errázuriz, que ha profesionalizado los distintos ámbitos de su
cartera, de tanta incidencia directa en el bienestar de la población.
Especialmente valorable es la búsqueda de una perspectiva integral para abordar
este sector, ya que en la medida en que las sociedades se desarrollan, las
personas tienden a usar más medios de transporte simultáneamente. Con todo,
habrá de velarse por que esta reestructuración no derive en mayor burocracia,
sin una mejor gestión. Para eso, su diseño final deberá establecer formas de
medir el desempeño de las distintas reparticiones.
Señor Director:
Yo lo vi.
Leyendo “El Mercurio”
del domingo 14 de octubre, encuentro la carta de la señora Guadalupe Vallerino,
quien, maravillada, contempló cómo en París la policía cumplía su labor, disolviendo
una marcha con todos los medios disponibles, con pleno apoyo del gobierno
socialista.
Justamente en los
lugares más representativos del civismo es donde con más claridad no se
confunde libertad con libertinaje y donde todo aquel que lo desee puede
manifestarse pacíficamente, sabiendo que al sobrepasar la línea del orden y el
respeto por los demás será reprimido sin contemplaciones. En lo personal, he
podido contemplar en la ordenada y adorable ciudad de Londres cómo una marcha
de hooligans o fanáticos del fútbol ingleses fue duramente reprimida, con
gases, lumazos al por mayor, fuerza de caballería montada y otros, tras haber
iniciado una destrucción de bienes públicos; se bloqueó calles, hubo carros
blindados, detenidos. Fue mayúscula mi sorpresa al día siguiente porque ningún
medio de comunicación hizo grandes comentarios de ese episodio; nadie indicó
que “se violaron los derechos humanos de los manifestantes”, nadie los
defendió; no hubo ministros hablando en la televisión y los detenidos quedaron
bajo cárcel, algunos de ellos por años, sin posibilidad de salir a volver a
delinquir. Se dejó a la policía que operara como debe, sin que la cuestionaran,
pues su misión es clara, preservar el orden público y ni pensar que fuese a
hablar el Primer Ministro ante un tema de tan poca importancia.
La diferencia con
nuestro país radica en que en Francia e Inglaterra las instituciones de orden
público se respetan, los vándalos les temen a la policía, al Gobierno y a la
ciudadanía, porque saben que están alineados con un mismo objetivo superior.
Leonardo Contreras V.
Señor Director:
Energía cara.
Con el anuncio
efectuado por Codelco de paralizar inversiones del orden de mil millones de
dólares en proyectos de expansión minera, en consideración a los altos costos
que alcanzará la energía eléctrica en los próximos años, se abre un nuevo
desincentivo a la inversión extranjera en Chile, producto de la escasa
generación de megaproyectos eléctricos en nuestro país.
La Ley 20.241,
promulgada en marzo de este año con el objetivo de incentivar la Investigación
y Desarrollo (I+D) en las empresas chilenas, es una excelente iniciativa para
el desarrollo productivo. Sin embargo, son las empresas mineras, que generan la
mayor cantidad de ingresos, empleo y producción nacional, las que deberían
encabezar la inversión en I+D, priorizando el desarrollo de nuevas fuentes de
energía eléctrica, para mejorar sus procesos.
Por su parte, el
desarrollo de proyectos energéticos se ve amenazado por una precaria certeza
jurídica en la tramitación de los permisos, que desincentiva la inversión en
nuevos megaproyectos, y que actualmente se ve perjudicado aún más con la
judicialización a la que han sido sometidos. En efecto, ya no basta con los
análisis técnicos y cumplir con la legislación medioambiental; la
judicialización de tales procesos ha abierto una nueva incertidumbre jurídica.
Según datos del
Ministerio de Energía, una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) toma
alrededor de 194 días, mientras que una Evaluación de Impacto Ambiental (EIA)
supera los 390 días, sin considerar los permisos sectoriales relacionados con
las concesiones marítimas (proyectos termoeléctricos), derechos de agua (obras
hidroeléctricas) y compras o arriendos de bienes fiscales, que aumentan
considerablemente la estimación inicial que nuestro país requiere con urgencia.
Este largo proceso de estudios de factibilidad y de tramitación no permite
garantizar el reemplazo, de forma rápida y eficiente, de megaproyectos como el
de Castilla, que produciría 2.100 MW y que fue rechazado por la Corte Suprema,
generando una alta incertidumbre en la inversión de nuevos megaproyectos
energéticos.
La fuerte presión de
ONGs y medioambientalistas, así como uno que otro oportunista político, tampoco
facilitan el desarrollo de nuevos megaproyectos. Actualmente los proyectos
alternativos de energías limpias y autosustentables no son la solución al
problema. Baste ver el proyecto de Codelco en el norte, en que se invirtió un
enorme dineral en poco más de 4.000 paneles fotovoltaicos para generar apenas 1
MW.
Si no se toma el toro
por las astas, a nivel de acuerdo político transversal, estaremos hipotecando
el futuro de Chile y su desarrollo. La falta de acuerdo en esta materia nos
llevará a los chilenos a pagar la energía más cara del mundo.
Álvaro Garfias Arze.
La frase del día:
“no hay ninguna
contradicción entre fomentar el desarrollo integral, la cultura de esta región
y de nuestros pueblos originarios, con tener una mano muy firme y decidida para
combatir la violencia y la delincuencia de unos pocos cobardes que se escudan
detrás de las sombras de la noche o detrás de capuchas para atentar contra
gente humilde, como Juan Carlos Curinao, como Héctor Gallardo, los atentados
que se han cometido contra gente del propio pueblo mapuche por el solo pecado
de querer trabajar y progresar en paz”.
Presidente Sebastián
Piñera en Temuco.