Tomás
González recibió ayer un merecido ‘’Premio Nacional de
Deportes’’
2012 tras su gran actuación en los Juegos Olímpicos
de
Londres, certamen en el que consiguió el cuarto lugar en las
especialidades de suelo y salto.
El
Gobierno envió ayer al Congreso el proyecto de Ley que convierte
al
programa "Elige Vivir Sano" en una política de Estado con
financiamiento
público, el que dependerá de la Subsecretaría de
Servicios Especiales del Ministerio de Desarrollo Social.
La
molestia generada por el manejo del cambio de Ministro de
Justicia
provocó la renuncia de Carlos Larraín a
la Presidencia
de
Renovación Nacional (RN), dirigentes intentan que revierta
su determinación y hacen gestiones para que cambie de opinión.
Creemos
que la renuncia de Teodoro Ribera al cargo de Ministro
de
Justicia, en el que realizó una gran labor, es una mala noticia
para
Chile, que por acusaciones infundadas pierde un Secretario
de Estado de lujo que fue mediáticamente ejecutado.
4
meses para profundizar la investigación que lleva adelante el
Ministerio
Público por las responsabilidades en las muertes de
156
personas y la desaparición de otras 25, tras la fallida alerta
de
tsunami del 27 de febrero de 2010. Abogado pide formalización
de Bachelet.
Elías
Figueroa fue nombrado Embajador de Porto Alegre para el
Mundial
2014, el ex Capitán de la selección chilena será el único
extranjero
que desempeñará ese rol dentro de todas las sedes
de la cita planetaria del fútbol.
La
Canciller alemana, Angela Merkel, advirtió del alto costo de
mantener
el Estado de bienestar social en Europa, indicando
que
para sobrevivir a la globalización, el continente debe
invertir
más en investigación y educación, además de hacer
reforma tributaria y laboral.
Hombres
ganan un 16% más que las mujeres por empleos similares
en
países de la OCDE, según un informe de la entidad, el riesgo de las
mujeres
de ser pobres al llegar a la tercera edad es 50% superior al de
los hombres.
Tikal,
ciudad histórica maya, tratará de subsistir un show de
Televisión
en vivo, conciertos, rituales, alcohol, luces y 10 mil personas
serán
algunas de las cosas que la flora, fauna y sitios arqueológicos del
parque soportarán por 24 horas, efecto
podría ser irreversible.
Newtown: ¿Más
cerca de lo que pensamos?,
por Cristina Bitar.
Una nueva tragedia golpea a Estados Unidos.
Otra vez una persona desquiciada y armada asesina a un grupo enorme de
inocentes, pero ahora el dolor es aún mayor. Lo incomprensible supera todo lo
imaginable, pues la inmensa mayoría de las víctimas eran niños de menos de 10
años. Lamentablemente, este caso, aunque especialmente horroroso, no es un
hecho aislado. Desde hace varios años se vienen repitiendo hechos semejantes,
en que una o dos personas, casi siempre muy jóvenes, irrumpen en una escuela u
otro lugar semejante disparando y matando por doquier.
En alguna parte hay que buscar la explicación y
claramente no se trata sólo de restringir el acceso a las armas de fuego.
Efectivamente, no es razonable que en una sociedad se puedan adquirir
libremente armas de alto poder letal como si se comprara una herramienta en la
ferretería, pero ésa no es la única causa de estas tragedias; es sólo un factor
que hace más fácil su ocurrencia. Creo que los chilenos debiéramos mirar este
tipo de tragedias como algo que puede estar más cerca de lo que pensamos. La
sociedad norteamericana, por la que siento enorme afecto y admiración, tiene
grandes valores, pero también algunas características negativas que, de alguna
manera, comienzan a verse entre nosotros.
Especialmente me refiero al valor social del
éxito, en un medio ambiente altamente competitivo. En Estados Unidos hoy hay un
mayor respeto por las minorías, es cada vez más fuerte el reproche social a
cualquier forma de discriminación racial o a minorías sexuales o religiosas.
Pero no existe el mismo respeto a la diferencia cuando ella está dada por el
carácter, por el aspecto físico o por las cualidades intelectuales. Allí los
grupos suelen ser implacables. ¡Ay de los llamados “nerds” en un mundo en que
todo se mide en función de la belleza y el éxito! Algo tan sano y deseable como
el deporte puede llegar a transformarse en una pesadilla para un niño que no
tiene condiciones y que se encuentra en un colegio que valora altamente el
liderazgo en esa actividad.
Si entre nosotros hay niños que llegan a
quitarse su propia vida ante la incapacidad para soportar la agresión del medio
en el que viven, la verdad es que no creo que estemos tan lejos de que algún
adolescente en esa circunstancia opte por el camino de atacar antes a los
agresores, viendo como tales a toda una comunidad.
Cada vez más entendemos nuestro país como una
sociedad individualista y menos como una comunidad de personas que comparten un
proyecto de vida común. En el proceso de reclamar contra los abusos, o de
expresar la rabia, muchos no miran el daño que se genera a su entorno. ¿Qué tan
lejos está un encapuchado con una molotov en la mano de este tipo de crímenes?
¿La diferencia es simplemente el calibre del arma que tiene en sus manos?
El polémico George Carlin escribió: “Hemos
aprendido a ganarnos la vida, pero no a vivir. Añadimos años a nuestras vidas,
no vida a nuestros años. Hemos logrado ir y volver de la Luna, pero se nos
dificulta cruzar la calle para conocer a un nuevo vecino”. Ojalá pronto seamos
un país desarrollado, pero no a costa de la felicidad y la humanidad.
Sernac,
por Adolfo Ibáñez.
Las personas están participando crecientemente
en la vida política, aunque en las elecciones voten menos. Actuando
directamente, a través de redes sociales o de agrupamientos espontáneos y
diversos, se hacen presentes con una frecuencia y una insistencia desconocida
hasta ahora. De aquí la importancia que ha ido tomando el Servicio Nacional del
Consumidor. Numerosas situaciones, de las cuales la de La Polar ha sido la más
importante por el número de afectados y por la complejidad del problema, le han
ido dando una trascendencia notable para canalizar la participación ciudadana.
Su labor se ha planteado como la defensa de los
derechos "del consumidor". En realidad, se debe decir "los
consumidores", pues en singular es una expresión del estructuralismo
socialista que transforma a las personas en entelequias. Sin embargo, su misión
no debe identificarse con un grupo determinado en oposición a otros, como
serían en este caso las empresas productoras o proveedoras de bienes y
servicios, que son la contraparte de los consumidores. Porque la misión del
Estado no consiste en defender a unos de otros, como si se tratara de una lucha
de clases: planteamiento erróneo y fracasado que esterilizó anteriormente los
esfuerzos del país, empobreciéndolo.
La misión del Sernac no puede ser otra que
velar por la rectitud de todos al participar en el mercado. Atributos
esenciales de éste son la transparencia, la libertad, la información y la buena
fe. Cuando algún consumidor falta a ellas, normalmente es acusado ante un
tribunal como delincuente. De aquí que se subentienda que otro organismo
debería observar el buen comportamiento de las empresas.
Custodiar al mercado no significa aumentar las
regulaciones debido a la presión de casos bullados. Ya se sabe que éstas
afectan la libre competencia, por cuanto significan barreras de entrada que
limitan la cantidad de partícipes y que, además, entorpecen gravemente la vida
de las empresas pequeñas. Esto último disminuye la competencia e incrementa la
tentación de acuerdos oscuros con diversos niveles de Autoridades: una gran
posibilidad para los que pretenden burlar al mercado.
El hecho de que el Sernac deba concurrir a los Tribunales
de Justicia lo diferencia claramente de las Superintendencias, que configuran
un sistema judicial-administrativo que no cuadra bien con la división de
poderes de la democracia. El objetivo final es que empresas y consumidores
participen y aporten lo que les es propio para beneficio del país.
Sesgos del
Instituto de DD.HH.
Es necesario que con fondos públicos se
mantenga un organismo como el Instituto Nacional de Derechos Humanos, encargado
de velar por el respeto de los derechos civiles en el contexto de la
convivencia democrática. Ningún sistema de Gobierno asegura que no se cometan
abusos, y los derechos humanos están a salvo simplemente porque la conducta de
los funcionarios Estatales se encuentre amparada por Leyes aprobadas en el
Congreso. Una actuación concreta, o incluso la misma Ley, podría ser violatoria
de los derechos humanos o presentar aspectos o dimensiones que lo sean.
Sin embargo, en muchos asuntos vinculados a la
definición de un derecho civil o a su ejercicio existen zonas de incertidumbre.
Así, hay colisiones de derechos, o materias en que existen diversas opiniones
legítimas, o discrepancias sobre cuestiones de hecho que inciden en la
afectación de un derecho -como, por ejemplo, si una situación de tumulto era lo
suficientemente crítica como para que las fuerzas de orden utilizaran
determinados medios disuasivos.
Por eso, un organismo como el Instituto
Nacional de DD.HH. debería limitar sus denuncias y críticas -no su trabajo- a
los casos no controvertidos, que son la mayoría, en los que nuestra sociedad no
está a la altura del respeto de la dignidad de las personas y sus derechos. En
cambio, se daña la credibilidad de la institución cuando se procede a denunciar
casos altamente polémicos y se afirma, por ejemplo, como ha hecho recientemente
su Director, que la Ley Antiterrorista "se ha aplicado solamente en
relación con dirigentes mapuches que reivindican legítimamente restitución de
tierras, y a una disidencia anarquista". Este tipo de juicios está
dirigido sólo a una parte del país, pues deja de lado, por ejemplo, el
sufrimiento de quienes han padecido los atentados de los activistas mapuches, y
también la idea, mucho más generalizada, de que no existen tierras que
restituir y que los mapuches no son ciudadanos de una categoría diferente del
resto de los chilenos. Así, ese Instituto está realizando afirmaciones que
polarizan a los chilenos, en vez de moverlos a todos a que presten más atención
a posibles afectaciones de los derechos en democracia, y a actuar en
consecuencia.
Si el Instituto Nacional de Derechos Humanos no
ha logrado consolidarse como lo que debería ser -un bastión en la protección de
los derechos civiles reconocido por todos los ciudadanos-, eso se debe en parte
a la manifiesta ideologización de la imagen que, con mayor o menor
intencionalidad, ha proyectado hasta ahora, la que se ha visto confirmada en
los últimos días.
Nota de la
Redacción:
Coincidimos con la necesidad de que exista un
organismo que vele por los derechos ciudadanos, pero creemos que el INDDH no
cumple esa función por tener una mirada sesgada e ideologizada que solo se
preocupa de los derechos de un sector del país.
Para que la labor del Instituto Nacional de
Derechos Humanos fuese fecunda se le tendría que quitar sus inclinaciones
políticas y a falsear las situaciones a la conveniencia izquierdista para
dedicarlo a proteger los derechos de todos los ciudadanos.
Riesgos
subyacentes para la economía chilena.
La medicióndel Indice Mensual de Actividad
Económica (Imacec) de octubre mostró un crecimiento en 12 meses de 6,7%. Esto
indica que 2012 terminaría con un crecimiento, eventualmente, sobre 5,5%, y que
la economía chilena habría estado creciendo en torno a 6% anual, en promedio,
en los tres últimos años. Esto es un muy buen desempeño en un período de
problemas en el mundo desarrollado. Más allá de esta positiva impresión, sin
embargo, las cifras no deben interpretarse como evidencia de una economía libre
de riesgos y con su crecimiento asegurado.
Desde luego, hay condiciones básicas que sí son
tranquilizadoras, y que diferencian radicalmente a Chile de muchos otros
países. El sector público, en términos netos, tiene activos y no pasivos, lo
que le da un amplio margen de maniobra para evitar situaciones críticas. Esta
realidad, sin embargo, puede diluirse si no se corrigen tendencias al gasto
público que no son sostenibles. En el Informe de Finanzas Públicas que acompañó
la reciente discusión presupuestaria se presentó una visión optimista sobre la
sostenibilidad de las tendencias en gasto público. Pero esa visión descansaba
en una discutible expectativa de crecimiento económico sobre 5% por año, y de
ingresos Fiscales en línea con esos ingresos, en circunstancias que el alza de
costos en la producción de cobre permite suponer que esa parte de los ingresos
Fiscales no va a crecer con el PIB. Mientras tanto, hay tendencias claras hacia
un nivel creciente del gasto fiscal.
No hay crecimiento económico asegurado hacia el
mediano plazo. Por una parte, las cifras de una década muestran un
estancamiento en la productividad. Luego, existen amenazas concretas, como
la que deriva de haber puesto la
estructura tributaria en el centro del debate político en el país, lo que va a
afectar la inversión. Está también el grave riesgo que representan los actuales
cuestionamientos al desarrollo de fuentes energéticas eficientes, que elevan el
costo de la energía. Tampoco se ha avanzado en reformar el mercado laboral, lo
que limita el mejor aprovechamiento de los recursos humanos nacionales, con
negativas consecuencias económicas y sociales.
Pero junto a las consideraciones de fondo sobre
riesgos para el crecimiento de Chile, es necesario precisar que tampoco el
corto plazo está asegurado, como muestra una lectura adecuada del crecimiento
de 6,7% en octubre. Mirando los datos del Imacec de los últimos tres meses,
corregidos por estacionalidad y días trabajados, la indicación es de
desaceleración de la economía en el trimestre agosto octubre, tal que de no ser
por la volatilidad de las cifras, -que puede hacer que esta indicación se
revierta-, llevaría a anticipar un desempeño pobre para 2013. A esto debe
agregarse que se está desarrollando un exceso de gasto en la economía, si bien éste
aún parece reflejar un repunte de la inversión, lo que lo hace menos
preocupante.
En definitiva, sin desconocer fortalezas en
nuestra economía ni desmerecer su buen desempeño reciente, lo prudente es
fortalecer su potencial de crecimiento, dando ahora gran prioridad al
perfeccionamiento de los mercados, a destrabar el problema energético y a
reflejar con más fuerza consideraciones de largo plazo en la política Fiscal.
Renuncia del Ministro
Ribera.
Ya en el comentario político del viernes último
nos referíamos a la delicada situación del Ministro de Justicia, que hoy ha
significado su alejamiento del cargo que desempeñaba. Tal como entonces lo
señalamos, pese a que no se haya acreditado un beneficio ilícito para los
centros de enseñanza superior que él ha dirigido o que su familia posee
intereses económicos, derivado de sus relaciones con Eugenio Díaz, el ex Presidente
dela Comisión Nacional de Acreditación hoy formalizado por diversos delitos,
las sospechas levantadas en su contra dañaron su imagen y la del Gobierno, y su
propia reacción frente a ellas forzó al Presidente Piñera a prescindir de su
colaboración.
Teodoro Ribera ha sido un excelente Ministro de
Justicia, con una dedicación notable a las múltiples tareas de esa cartera,
desde las reformas legislativas a la solución de los graves problemas
carcelarios a que hace poco nos referimos. No obstante la inocencia que
proclama en este caso y que hasta ahora no ha sido legalmente desvirtuada en el
ámbito penal, resultó afectado por un desafío que no es nuevo en esta Administración:
el de los conflictos de interés. Se trata de un asunto característico de la
vida pública, sobre todo cuando sus actores han desarrollado actividades
diversas donde sus intereses personales pueden entrar en colisión con los de la
comunidad o del Estado.
Sin embargo, como lo ha manifestado en estos
días el Presidente de Transparencia Internacional, lo que importa no es que ese
conflicto exista, sino cómo se resuelve, y aquí el ex Ministro no fue
suficientemente claro en sus sucesivas versiones de los hechos y se equivocó en
sus juicios al minimizar su importancia y sostener que, con estas exigencias
éticas, sólo un indigente o un profesional de la política podría ser parte del
servicio público. Por el contrario, la experiencia en distintos aspectos de la
realidad social es un valor apreciable para un político, siempre que en sus
decisiones sepa separar el beneficio propio del bien común, sea renunciando
anticipadamente a esa dualidad o absteniéndose de intervenir en el caso
concreto de que se trate, y comprendiendo que las mayores responsabilidades
públicas suponen un estándar ético por encima de lo que exige la Ley.
La presencia en este período de numerosos altos
funcionarios con amplia trayectoria en el sector privado, que ha constituido un
valioso aporte a la clase política, naturalmente aumentó la frecuencia de este
tipo de conflictos, y si bien la oposición ha convertido esto, a veces sin
mayor justificación, en uno de sus caballitos de batalla, es cierto que en el
oficialismo el aprendizaje ha sido lento y, como lo muestra este episodio, aún
no termina. En este período, las denuncias de corrupción han tenido respuesta
más rápida y eficiente que en etapas anteriores, pero aun así parece
conveniente revisar la normativa correspondiente cuando ella —como en el caso
de la Comisión Nacional de Acreditación— facilita que se den estas disyuntivas,
pues si es clara, como en el Sernac, donde expresamente se establece la
abstención personal en caso de conflicto, éste es fácil de evitar. Más
importante todavía es que se apruebe la ley de fideicomisos, pendiente en el
Congreso, que se anticipa a resolver las situaciones de mayor complicación.
Nueva agenda
pro inversión.
El Ministerio de Economía dio a conocer la
Agenda Pro Inversión y Competitividad, documento que contiene 20 medidas
referidas a recursos hídricos, energía, minería y evaluación ambiental. Se
trata de una iniciativa valiosa, que continúa la agenda pro inversión puesta en
marcha a comienzos de la actual Administración, pero que requiere ser
complementada con otras medidas más de fondo para resolver los problemas a los
que apunta corregir.
El diagnóstico sobre el cual se estructura el
documento indica que se buscan soluciones concretas a las dificultades que
enfrentan las empresas en Chile, como el alto costo de la energía, la
incertidumbre jurídica en la tramitación de proyectos y las trabas
burocráticas. Se trata de problemas objetivos que han entrabado proyectos de
inversión, lo que resulta perjudicial para el país, al restar posibilidades de
mayor crecimiento y generación de empleo. Varias de las iniciativas planteadas
deberían ser motivo de una tramitación expedita, aunque otras podrían requerir
un mayor grado de discusión, como la que busca impedir las solicitudes
especulativas de agua. Otras de las medidas se refieren a aspectos de largo
alcance, como la necesidad de agilizar los plazos de tramitación de las
concesiones mineras o la creación de una unidad especializada de apoyo para la
evaluación de proyectos de gran complejidad.
Es altamente positivo que desde el propio Gobierno
se reconozca la necesidad de contribuir a despejar la incertidumbre jurídica,
lo que ha sido especialmente evidente en materia de inversiones mineras y de
energía. Las propuestas contenidas en esta nueva agenda avanzan en esa
dirección, pero es necesario que se produzcan compromisos políticos que
reflejen la voluntad de impulsar aquellas iniciativas relevantes para el país,
como también la necesidad de que los Tribunales de justicia acoten su actuar al
ámbito estrictamente jurídico, sin entrar a resolver cuestiones técnicas.
Evolución
Política: ¿amenaza u oportunidad?
El ex titular de Mideplan y ex Secretario de
Aldeas y Campamentos, Felipe Kast, ha lanzado un movimiento independiente de
centroderecha denominado "Evolución Política", con miras a participar
en las primarias para Parlamentarios del próximo año. Kast informó que este
movimiento posee tres ejes centrales: valoración de la diversidad, el afán de
justicia social e igualdad, y el localismo. Aunque hasta ahora sólo aparecen
públicamente como candidatos el propio Kast y el ex Intendente de la Región de
Los Lagos Juan Sebastián Montes, el objetivo es que se sumen quienes no se
sienten suficientemente identificados con los actuales partidos de la Coalición
por el Cambio y quieren participar en las elecciones Parlamentarias -al menos
unas 50 personas más-. Además, el movimiento sostiene contar con el respaldo de
diversos personajes políticos nacionales y regionales.
En un cuadro nacional en el que la oferta
política ha estado monopolizada por ciertos rostros y corrientes políticas, y
el desinterés en ella ha ido quedando crecientemente de manifiesto en las
encuestas, es interesante y normal que una nueva generación quiera abordar el
servicio público con iniciativas independientes, que pueden aumentar la
representatividad y cercanía de la clase política con la ciudadanía. Asimismo,
es considerable el reto que tiene por delante este nuevo movimiento, que ha de
abrirse espacio dentro de un sistema político que se ha mostrado reacio a
cambios mayores, como el de limitar la reelección indefinida. Su eventual éxito
sería una señal de que es posible incorporarse desde una posición
independiente, sin necesidad de reemplazar todo el sistema de Gobernabilidad
vigente.
Con todo, el desafío mayor lo enfrenta la
propia Coalición por el Cambio. Para sus partidos se da la paradoja de que, por
una parte, se benefician al incorporar a sus primarias a candidatos
independientes capaces de atraer votantes indecisos, que pueden reconectarse
con los principios y valores de centroderecha. Pero, por otra, algunos de sus
miembros históricos ven amenazados su poder y posibilidades de reelección. Por
tanto, al tiempo que este nuevo movimiento aumentaría la oferta política de la
Coalición y su capacidad de conquistar nuevos votos, también abre el
interrogante de definir cómo se abrirá espacio a estos candidatos para competir
desde su propia identidad. Todo ello es hoy posible por el mecanismo de
primarias.
Acreditación
universitaria y Freirina.
El escándalo de las acreditaciones
universitarias y el caso de la planta de cerdos de Freirina son ejemplos de las
contradicciones con que Chile enfrenta su desarrollo como país. Desde hace 20
años, la educación superior se multiplicó varias veces, otorgando oportunidades
desconocidas a miles de jóvenes gracias al emprendimiento privado. Este debía
ser sin lucro en la educación, pero permitía -y todavía no prohíbe- explotar el
negocio conexo del suministro de infraestructura; o sea, el mercado operó y
bien. Como desconfiamos de éste, se dijo que era necesario que el Estado
cautelara la calidad, estableciendo una acreditación de los establecimientos
como condición para que los postulantes accedan a financiamiento, sin el cual
no podían estudiar. Cuando lo que define una comisión es sinónimo de calidad y
eso asigna las platas de Moya, aumenta el riesgo de corrupción. Y así fue.
Además, se satanizó el mercado en la educación
superior; tanto, que ya hablamos del inexistente delito de lucro y tenemos
fiscales “anti lucro”. Así, ya no es posible la solución que el mercado había
provisto en casos anteriores, que sólo favoreció a los afectados: una cartera
de estudiantes y la infraestructura instalada tienen un valor, de modo que
siempre hubo otros planteles dispuestos a absorber a los que fracasaron. Ahora,
en la nueva realidad, nadie se atrevería a hacerlo. Falló el Estado supuestamente
infalible y se ató de manos al mercado. Miles de alumnos en la incertidumbre.
La pestilencia de una planta de cerdos mal
manejada hace que se demande una acción enérgica del Estado: cerrarla definitivamente.
Ya nos recordó la Ministro del Trabajo que la autorización la dio el Estado sin
ser muy enérgico en los requerimientos. Es cierto que la empresa perdió el
control y la fetidez no dio para más, pero ha hecho esfuerzos e invertido
millones para corregir y reactivar un proyecto significativo para el futuro de
la Región. Debiera llevarse adelante, siempre que se demuestre que no volverá
el hedor. Pero grupos radicalizados no aceptan nada; tampoco un proyecto
termoeléctrico en la zona muy necesario, aunque se le puso la condición de
disminuir el nivel actual de emisiones en ella. El desarrollo local y nacional,
según parece, se logrará por arte de magia.
Un dirigente gremial acusó una preocupante
intolerancia al progreso. La preocupación vale, pero no el concepto. El
chileno, además de quejarse, está gozando “a full” del progreso: todos compran,
viajan y se dejan caer como enjambres en los malls. Más que intolerancia, es
incoherencia: todos quieren encender sus variados aparatos electrónicos, pero
no que haya centrales eléctricas; quieren consumir y que les saquen prestamente
la basura que producen, pero que los basurales estén en el limbo; quieren más
delincuentes presos, pero no cárceles cerca.
Es el Chile contradictorio, que goza del modelo
y se beneficia de él, pero no acepta sus reglas; que exige, pero no está
dispuesto a pagar costos. Los problemas, que los resuelva otro. Es el resultado
de años en que la política sólo consistió en regalonear al ciudadano; nada de
mencionar sacrificio, costos, coherencia o deberes. Como con los cerdos, no es el
modelo, sino cómo se dio el afrecho.
Crisis
poblacional en Rusia.
En las últimas dos décadas, cada año, con
excepción de 1993 y 2010, han muerto más rusos que cuantos nacieron. En 1992,
la población era de 148,6 millones de personas; en 2010, esa cifra cayó a 141,9
millones. Las bajas tasas de natalidad no son asunto sorprendente en los países
desarrollados (en EE.UU., por ejemplo, es de 1,9 hijos por mujer), y Rusia no
tendría por qué mantenerse ajena a ese fenómeno. Entre 1987 y 1993, los
nacimientos cayeron de 2,5 millones a 1,4 millones, y a 1,2 millones en 1999,
con un leve repunte en los años siguientes, según Nicholas Eberstadt, en un
artículo publicado en " Foreign Affairs ". La tasa de fertilidad de
las rusas es baja, 1,6 hijos por madre, insuficiente para estabilizar la
población en el largo plazo, especialmente por la alta tasa de mortalidad en
ese país, con una expectativa de vida de 64,3 años para los hombres y de 76,1
para las mujeres.
Esta baja expectativa de vida tiene dos causas
principales: la mala salud y la altísima tasa de muertes por acciones
violentas. En su estudio, Eberstadt asegura que la situación de Rusia es
equiparable con países del Tercer Mundo, y da como ejemplo que, en 2009, la
expectativa de vida de un ruso de 15 años era menor que la de su par en
Bangladesh, Eritrea o Níger, y que la de un ruso adulto era menor que la de su
equivalente en Botswana, Ruanda o Sudán. En el caso de las mujeres, la tasa de
mortalidad equivale a la de las bolivianas, un vuelco dramático, pues 20 años
antes la tasa para las rusas era 45% más baja que en Bolivia.
En este contexto hay que analizar la
preocupación de Putin, quien además llamó a "reforzar las bases morales y
espirituales de la sociedad". Ya en 2006 el Presidente había convocado a
las mujeres a tener más de tres hijos, e incluso lanzó un plan de incentivos y
créditos (hasta de 10 mil dólares) para aquellas que asumieran el desafío. En
esa misma oportunidad, firmó un decreto en el que se establecían medidas para
estabilizar la población en una meta de 145 millones de personas para el año
2025, con una tasa de fertilidad de 1,95 hijos por mujer, y una expectativa de
vida de 75 años (estaba en 67). De acuerdo con este programa, en 2012 los
nacimientos podrían equiparar al número de muertes, y superarlas en 2015. Entre
las medidas que se adoptaron, además del incentivo a tener más hijos, se buscó
desarrollar educación preescolar, mejorar la salud de los adolescentes,
promover estilos de vida sanos, una campaña antialcoholismo, y fortalecer las
familias.
Las palabras de Putin parecen confirmar que la
meta no se logró. Según Anatoly Vishnevsky, del Instituto Demográfico de la
Universidad de Moscú, incluso con activas políticas demográficas y de
inmigración es imposible que se revierta la tendencia en el futuro cercano.
Cuando países como China e India, cada uno con
una población de bastante más de mil millones de habitantes, reexaminan sus
políticas en relación con el crecimiento demográfico, el desmoronamiento numérico
de la población rusa es un llamado de atención a todas las naciones modernas
miopes al drama del envejecimiento de las sociedades, que va en directo
perjuicio de su desarrollo y progreso -e incluso de su propio futuro.
Mercosur en expansión.
En medio de la crisis internacional, la
integración en el Mercosur va adquiriendo otro perfil, más político, con la
incorporación en la última cumbre, en Brasilia, de Venezuela como miembro pleno
y la firma del protocolo con el que Bolivia inicia el proceso para adquirir la
misma categoría. Entretanto, Paraguay continúa suspendido y reclama que las
decisiones -en especial la de aceptar a Venezuela- sin su voto no son
legítimas.
Dilma Rousseff se ufana de que la incorporación
de nuevos miembros demuestra la fortaleza y vitalidad del Mercosur, que en
época de crisis externa esto "vuelve más importante aún la
integración" y los alista para "enfrentar las turbulencias del
mercado internacional".
Sin embargo, es inocultable que la organización
atraviesa complejos problemas comerciales. Lo que no dice Dilma es que, para el
liderazgo de Brasil, el ingreso de Venezuela, con o sin Hugo Chávez, es
políticamente importante como contrapeso de Argentina. Lo mismo vale para
Venezuela, cuyo comercio sigue enfocado en el norte, pero que aspira a tener un
rol político clave en América del Sur. De ahí que le asigne tanta relevancia a
la incorporación de Bolivia, y eventualmente de Ecuador (cuyo Presidente, vacilante,
quedó de estudiar si el ingreso le conviene).
En Bolivia, al entusiasmo del Gobierno se
contrapone el escepticismo del sector privado. Los exportadores dudan de que el
proceso beneficie al país. Según estos empresarios, sus productos están mejor
comerciados en la Comunidad Andina de Naciones (CAN), de la cual temen que el
Mercosur los obligue a desvincularse. Sospechan que el sector agropecuario y la
agroindustria tendrán dificultades en un mercado tan proteccionista. Tampoco
les gusta la idea de que se limiten las posibilidades de firmar TLC con países
fuera de la región. Tienen el antecedente de que el Mercosur no avanza en sus
negociaciones con la Unión Europea, en tanto, Perú, Colombia y Centroamérica
acaban de lograr la ratificación de sus respectivos acuerdos en el Parlamento
Europeo.
¿Qué perfil adquirirá el Mercosur en el futuro?
¿Cómo resolverá los innumerables problemas que ha tenido el proceso en sus
últimos años, especialmente los que ha creado Argentina con su actual política
económica? ¿Qué pasará con Paraguay cuando éste elija un nuevo Presidente?
Estos interrogantes hacen del porvenir del Mercosur una incógnita.
Un par de cartas
cortas, pero decidoras:
Señor Director:
Verbo lucrar.
Hasta ahora no hay chilenos que usen la primera
persona del singular o del plural del verbo lucrar. Nadie se atreve a decir
"yo lucro" o "nosotros lucramos". Son siempre los demás.
Pedro Lizana Greve.
Señor Director:
Reunión PC y DC.
El 13 de diciembre de este año quedará marcado
en la historia de nuestro país como el
día en que la Democracia Cristiana renunció a sus más profundas convicciones,
con tal de tener más posibilidades de acceder nuevamente a La Moneda.
Lamentable.
Mauricio Gil S.
Partido
Comunista: supuestos 100 años,
traicionando
a Chile y a su pueblo.